Aguante.

Viendo fotos que tengo con mis amigos
me di cuenta que
cuando los miro
el amor se me escapa por los ojos
y no puedo evitar
mostrar lo mucho que los quiero,
y pensé que si estuviera enamorada
no quiero fotos,
ni mirar,
pensé
no quiero que nadie se de cuenta
de todo lo que siento,
pensé
que seguro salgo corriendo a esconderme
en algún lugar
donde no me puedan herir de nuevo.

Pensé subirme a un árbol
muy alto
mirar con los pájaros
volarme un rato
para no engancharme
para no tener fotos
con miradas
que me recuerden al amor
cuando el amor ya no este.

Y después pensé
que nos pasa a todos,
a mis amigos,
a mis hermanos,
a mis vecinos,
a esa compañera que no veo hace años
pero me cuenta que solo quiere joder
porque le da miedo el futuro.

Pensé
De dónde vienen esas ganas de disimular
esas ganas de ocultar todo lo que sentimos
en verdad
cuánto cuesta
cuánto cansa
no aceptar las emociones
que nos laten
así sin más.

Que cagona
pensé.

No se puede
salir corriendo
todo el tiempo
no se puede
correrse
de lo que se siente.

Entre aliviada
y fortalecida
hasta cansada
pensé:
no me importa más.

Aguante
aguante quererse,
aguante sentir,
aguanten las miradas de amor,
aguante animarse
cuando ya nadie se anima a mirarse,
aguante,
aguante que el amor se escape por los ojos
y quede registrado
en una foto.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Hasta cuándo?

Voces

Día 8: